La directora del Instituto de la Mujer, Rosa María Peris, ha afirmado hoy que la Ley Integral contra la Violencia de Género "no es intocable" y no descarta modificaciones en caso de que algunos de sus objetivos no se cumplan plenamente.
"Muchas veces hablamos de modificar la ley cuando el problema no es la ley, son los operadores en su aplicación", ha precisado en una entrevista concedida a Europa Press en el marco de los Cursos de Verano de la Universidad Complutense de Madrid, en El Escorial.
Respecto a la posibilidad de que una reforma de esta norma se aborde en la próxima Conferencia de presidentes autonómicos, considera que el Gobierno es "consciente" de los esfuerzos que hay que realizar para "desplegar" la Ley.
"No sé qué acordaran los presidentes", ha indicado, para subrayar que dicha ley es "buena" y calificarla como "una de las mejores en la Unión Europea".
"El problema no está siendo tanto la ley como la aplicación de la ley", ha insistido, antes de subrayar el valor de buscar "mecanismos de coordinación y de aplicación" con el fin de que esta legislación "funcione mucho mejor".
En este sentido, se ha mostrado convencida de que el Gobierno y en concreto el Ministerio de Justicia, "seguirá invirtiendo esfuerzos y elementos económicos" para dotar a los juzgados exclusivos en esta materia de los medios necesarios.
«Sensación de asfixia»
A su juicio, aunque "no se puede permitir la complacencia" en el balance de los tres años de la puesta en marcha de la Ley Integral contra la Violencia de Género, "hay que poner en valor" sus "avances", porque si no "da una sensación de asfixia".
Por ello, ha celebrado que la normativa esté "surtiendo efectos", tal y como corroboran "los indicadores que marcan que las cosas van a mejor".
Peris ha destacado que todavía es preciso "un cambio cultural a más largo plazo", donde hay que "seguir trabajando" para conseguir una mayor concienciación social, que considere la violencia de género como "una cuestión pública" y no como un mero ámbito privado en la relación de pareja.
Por otro lado, ha puesto de relieve el estado en el que se encuentran las mujeres víctimas de agresiones domésticas, muchas de ellas "muy desorientadas y tocadas anímicamente". Tal comportamiento demuestra, a su juicio, la "complejidad" de este fenómeno y cómo la mujer interpreta, en muchos casos, a quien "le hace vivir un infierno" como su "salvador".
En cualquier caso, ha asegurado que las víctimas han conseguido alejarse de sus maltratadores gracias a los recursos y apoyos económicos que contempla la Ley Integral. Además, ha recalcado que se elaborará un "plan específico para el empleo de las mujeres víctimas de violencia de género", consensuado con los principales sindicatos y que, según ha dicho, el Gobierno "está a punto" de presentar.
Peris también ha hecho mención a la situación que viven mujeres inmigrantes víctimas de agresiones, y ha lamentado que se tienen que enfrentar al hecho "de no tener a su familia" en España, al desarraigo y a una lengua y unas leyes que desconocen.
Por ello, ha subrayado el esfuerzo de la Administración Pública en "establecer medidas" que se acerquen a las extranjeras víctimas de la violencia de género.
Aumentan las denuncias de inmigrantes
En esta línea, se felicitó por que el número de denuncias de este colectivo aumenta, lo cual, ha dicho, significa que parte de la información "les va llegando", como pone en evidencia que "empiezan a reivindicar su derecho a la libertad y autonomía".
Finalmente, a preguntas de los periodistas al inicio de la ponencia 'El centenario del 8 de marzo: La igualdad en el mundo del trabajo', ha celebrado la "apuesta por la paridad" y la "visibilización" de la figura de la mujer en puestos de dirección en las empresas.
No obstante, ante tal "buena noticia", ha criticado que las trabajadoras todavía se tienen que enfrentar al "handicap" que supone el embarazo, así como el "acoso sexual", que sigue siendo "una realidad escondida" pero que, ha dicho "muchas mujeres sufren" en el ámbito laboral.
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