La medida planeada por Pajín recuerda a épocas pasadas, en las que la censura y el control gubernamental de los medios estaban a la orden del día. Ahora, en pleno siglo XXI y con la dictadura mediática en total desuso, la actual ministra socialista considera que es mejor esconder los crímenes que buscar ponerles remedio. Para lograrlo no ha dudado en exigir a los medios que aprueben un proyecto que les aprisiona a la hora de informar sobre un cáncer tan extendido como es la violencia de género.
Pese a todo, el Ministerio de Sanidad, Política Social e Igualdad asegura que la propuesta "no trata de limitar la libertad de expresión" y que tiene como propósito que la información no se centre en la víctima, para así "reducir el efecto imitación" en los agresores. De hecho, el ministerio liderado por Leire Pajín (en la imagen) anima a las cadenas a que se contextualice en el clima general de violencia de género, a que no se hable de "suceso" y a que se informe del hecho como conducta criminal del agresor.
Así, tal y como informa 'El Mundo', éstas son algunas de las recomendaciones que la Delegación de Gobierno contra la Violencia de Género ha incluido en un documento dividido en dos partes: la primera explica la concentración de crímenes de género que tienen lugar tras un asesinato machista y la segunda propone a las televisiones una manera diferente de enfocar sus informaciones.
En este sentido, Leire Pajín ya ha enviado estas propuestas a las cadenas para que éstas presenten sus alegaciones si así lo consideran. El texto enviado por Igualdad a las privadas parte de un concepto clave: el efecto imitación que podría llevar a determinados agresores a repetir el crimen previamente visto en televisión. Por tanto, el plan de Pajín trata de reducir ese 'efecto imitación' mediante el control de las informaciones sobre crímenes machistas en la pequeña pantalla.
"No se trata de no informar, sino de cambiar la forma en la que se informa eliminando los elementos que pueden precipitar el paso a la acción a determinados maltratadores", indica el informe elaborado por Igualdad, que también anima a no informar de la nacionalidad de la víctima ni del agresor así como a que las imágenes emitidas sean "neutras", evitando las del cadáver, la sangre, el arma o los familiares de la fallecida.
Además, el informe propone presentar el hecho como conducta criminal del agresor diciendo "un hombre ha asesinado a su pareja" en vez de "una mujer ha sido asesinada por su pareja" y empuja a hablar del agresor como si se tratase de un etarra: "Cuando ETA atenta no se dice 'un vasco ha disparado'. Se podría decir 'un machista ha asesinado...'".
No hay comentarios:
Publicar un comentario